martes, mayo 09, 2006
Horas inciertas,
futuro incierto.
Miro el albornoz que cubre mi cerebro.
Horas espesas, calma espesa,
locura transitoria, permanente silencio.
Miro el reloj que adorna mi minutero.
Agua de avellano, caza de presa,
vida en el horizonte pero no en mi pecho.
Miro de reojo las cruces de mi cementerio.
Horas inciertas,
Horas espesas,
en días de desierto
necesita agua para seguir viviendo.
Dichos varios:
<< Estás invitado a otro café
¿Por qué habré experimentado un evocador sentimiento de esperanza? ¡Qué raras son las palabras en la mente del que las tergiversa!
Publicar un comentario
<< Estás invitado a otro café